Suele pasar que, cuando uno se repite
constantemente una cosa, por muy descabellada que sea, se la termina creyendo.
Quizá sea por animarse a uno mismo en momentos de
flaqueza y desesperación. Me he repetido tantas veces que todo iba a ir bien,
que al final todo ha ido bien.
Quizá sea por castigarse a uno mismo por algo que
cree haber hecho mal. Me he repetido tantas veces que todo va mal, que al final
todo va mal.
Quizá sea por conseguir una meta aceptable, una
meta que puedas, o creas poder, alcanzar. Me he repetido tantas veces que eras
tú, que al final fuiste tú.
Cuando uno se repite constantemente una cosa, por
muy descabellada que sea, se la termina creyendo. Siempre pasa. Cuando uno se
repite constantemente una cosa, por muy descabellada que sea, se la termina
creyendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario