A saber.
Su supuesta
cordura la hacía actuar de forma irracional y contraria a como antaño le habían
enseñado. ¿Acaso era cierto? ¿Estaba dispuesta? No, supongo que no... Mas, ¿qué otra cosa iba a hacer? Reflexionar,
tal vez, y no moverse del sitio hasta pensar con claridad. Sin embargo, tampoco
sabía qué pensar. Cavilaba entre si hacía bien estableciendo esa barrera
llamada ignorancia o si hacía mal queriendo salvarla. Por supuesto, ambas
opciones eran independientes entre sí, pero ella no lo sabía y seguía situada
en medio de aquella valla sin decantarse por un ala.
No hay comentarios:
Publicar un comentario